imprimir
Entrevista para Contrastes.
Entrevista de Juan Barcala a Fundación Rodríguez para la revista Contrastes.

1. En vuestra opinión, ¿cuál es el contenido de términos como alternativo, off, independiente, etc., en el espectro artístico actual? ¿Qué es lo que acota? ¿Son meras etiquetas? ¿Diríais que vuestros proyectos son alternativos o independientes o pensáis que vuestro trabajo no tiene nada que ver con esto?
Son varias preguntas que llevan inscritas ciertas variables…
Las "categorías" que citas operan a varios niveles, como consecuencia de un panorama o un tejido artístico desestructurado y claramente confuso, pero sobre todo son resultado de prácticas híbridas entre iniciativas más o menos voluntaristas o comprometidas, y vacíos o huecos en las responsabilidades institucionales con respecto al arte y la cultura.
Muchas veces estas categorías no concuerdan exactamente con su verdadera denominación, porque necesitan el respaldo del dinero público para poder llegar a ser. Muchas veces sería paradójicamente imposible "ser independiente" sin el dinero público. Así que la complejidad de la producción artística actual obliga a revisar en cada caso el componente "independiente" o el grado de autonomía de cada proyecto, en un tiempo en que la propia institución juega a asumir como suyas las propuestas divergentes o críticas…, parece que los discursos antihegemónicos vienen ahora servidos desde la institución…
(Se diría que en el momento de analizar cada caso "alternativo" habría que valorar la solución final tanto como el mecanismo que lo ha hecho posible…).
Nuestros proyectos surgen siempre como motivación propia y nacen de una confrontación con nuestro entorno "cultural" de trabajo. A partir de ahí buscamos la financiación de un modo concreto para cada iniciativa.

2. Hablad un poco sobre lo que supone la descentralización de la exhibición artística a través de los nuevos formatos de expresión. ¿Conlleva una mayor independencia?
No necesariamente conlleva una mayor independencia.
Lo que entendemos como descentralización de la exhibición tampoco está forzosamente vinculado a los nuevos formatos de expresión, sino más bien a estrategias de difusión, de distribución, pero sobre todo de relación. Subvertir el sistema de relaciones en que se basa la "institución-arte" es el mecanismo más efectivo de "des-concentración". Diríamos que la rigidez de la estructura choca frontalmente con la confusión, con esa des-regularización de las relaciones de este mundo artístico. Por ello, la corriente dominante, no es que sea dominante, sino que es única. La otra lista de 40 principales, la de los malditos, tarda un poco más en ser dominante…
Es cierto que nuestra búsqueda de modelos descentralizados se ha apoyado mucho en los nuevos soportes, en las nuevas posibilidades creativas, pero entendiendo siempre la red en su sentido más amplio (como red de nuevas relaciones) y siempre desde una intencionalidad crítica con el propio soporte ( y con su contexto social y político).

3. A medida que he ido observando los diversos proyectos que habéis llevado a cabo en los últimos años, me ha dado la impresión de que, cada nuevo proyecto, conlleva un endurecimiento del discurso. En mi opinión, existen diferencias de peso específico entre 'Arte y Electricidad' y, por ejemplo, 'Tester' (en lo que concierne a la acción) o 'Web-Side' (en lo que toca a la reflexión). ¿Cómo lo veis vosotros?
Es posible. Si es así deberíamos enmarcarlos en el propio desarrollo discursivo de nuestro trabajo, entendido este como parte del proceso creativo de nuestra actividad.
Siempre hemos entendido nuestros proyectos como extensión de nuestro trabajo creativo y como profundización de nuestra formación intelectual, más allá de nuestra labor de gestores, coordinadores, curadores o como se quiera llamar.
De ser cierto lo que dices, debería entenderse como trayectoria de nuestro colectivo, como itinerario natural.... Pero sin duda es la apertura progresiva al debate y a nuevas formas de reflexión la que puede proporcionar esa idea que dices. Quizá sea solo una consecuencia, o una apariencia, o un efecto…no es en cualquier caso algo premeditado.
Es más sugerente conocer a gente y aprender, que seguir mostrando lo que ya todo el mundo conoce…

4. Precisamente me ha llamado mucho la atención 'Web-Side' por lo que se refiere a la interconexión de las áreas de pensamiento y acción. Utilizar los medios que ofrece la red (plásticos, audiovisuales, textuales, interactivos, etc.) para plantear nuevas formas de reflexión. Quizá sea una tontería, pero me ha recordado a cuando se menospreciaba a Nietzsche porque utilizaba aforismos para ensayar sus ideas.
Ha habido una desideologización de la práctica artística, como consecuencia del proceso de banalización de la cultura (y de la vida).
/ ¿La vida inscrita en la cultura o la cultura inscrita en la vida? /.
De alguna manera cierto esquema (perteneciente al sistema de relaciones que citábamos antes), ha dado preponderancia a un tipo de crítica artística que ejercía una labor de "traducción", cuando no "poética" o torpemente legitimadora de ciertas corrientes. En muchos casos el artista dejo de pensar "políticamente", en muchos otros casos se arrebató la palabra al artista…
Nuestra intención ha sido siempre mantenernos ajenos a la diferencia entre pensamiento y acción. Los medios que ofrece la red, no potencian este tipo de posicionamiento, pero le dotan de otro tipo de permeabilidad, en la que es posible investigar el grado de porosidad de obra artística y de reflexión teórica, para valorar a continuación la circulación que puede darse entre poros de una y otra. Del mismo modo en que se cita una película para ilustrar una idea o una situación, nos gustaría citar otro tipo de obras audiovisuales, y/o simplemente hacerlas, para completar así nuestra idea o reflexión.

5. De todos modos, es posible que, hoy por hoy, estas nuevas formas cierren puertas, ya que hay que tener una buena base para poder entender las reflexiones que se plantean. ¿Cómo reacciona el público ante estas manifestaciones humanas (llamarlas artísticas sería pecar de reduccionismo)? ¿Se han fomentado y alimentado debates entre los observadores o se ha circunscrito el campo de acción a los mismos integrantes de los diferentes proyectos?
Otras de las posibilidades que ofrece la red es un feed-back muy vivo. Con "Arte y electricidad" vimos recompensado nuestro objetivo de llegar a "otros públicos" con la constatación de muchos pedidos del CD (vía web) por parte de un público ajeno al mundo del arte (que en cierto modo era al que nos proponíamos encontrar). Recibimos también muchos mensajes de muy distinta gente, con muy distintos intereses. Contactaron con nosotros para invitarnos a muy distintos foros, encuentros y festivales, y conocimos muchas iniciativas de las que nunca hubiéramos tenido noticia…
Eso fue de alguna manera un regalo propiciado por el propio proyecto. También hubo críticas como es lógico, y siempre, siempre hemos tenido dificultades para hacer entender lo diverso del proyecto (que es a la vez: doble CD-rom, web, programa de video, presentaciones y acciones con video-música, etc…). Es difícil hacer entender que todo esto es sólo un proyecto, y que todo funcione como proyecto artístico unitario, pero en el trabajo de explicarlo, seguimos encontrando posibilidades performáticas.
Estamos deseando presentar Web-side porque el tema "Mapas para la desorientación", nos sugiere cantidad de acciones, cantidad de situaciones y chistes posibles…

6. ¿Qué os parece que vuestros proyectos estén subvencionados por instituciones públicas? ¿Puede sobrevivir un proyecto de este tipo financiado con dinero público o necesariamente este hecho lo transforma en un proyecto manipulado, un una marca, al fin y al cabo?
Como comentábamos en la primera de las preguntas muchas cosas no pueden llegarse a hacer sin el respaldo de la institución, sin el apoyo del dinero público. Pero hay que valorar este sistema en su justa medida. Con muchos de nuestros proyectos hemos puesto en relación a distintas instituciones, hemos recuperado dispositivos o recursos públicos o hemos forzado líneas de producción donde antes no las había. En este territorio, hay mucho trabajo que hacer. Las relaciones con la institución no solo se resumen en pedir dinero, sino en entrar en diálogo, en propiciar nuevas vías de cooperación. Hay un componente político del que, como comentábamos antes, se han desentendido muchos artistas porque han dado como bueno el sistema de relaciones de poder de ciertos comisarios o ciertos mediadores. No hay que avergonzarse de acudir a "lo público" para este tipo de cosas, porque es tan nuestro como de cualquier otro. La cultura precisa de un espacio de libertad y de relación quizá mayor que el de la máquina herramienta o el sector textil, porque se basa en la transmisión y en la actualización de conocimiento, más allá del mero consumo. Y en esta situación política actual de aplicación de patrones empresariales a la industria cultural, hay que asumir responsabilidades, hay que trabajar.
Sin duda, en este tipo de negociación, hay que cuidar la independencia ideológica, pero eso ya entra dentro de los apartados correspondientes a dignidad personal y profesional, y de orgullo, decencia, etc, que no es el momento de tratar aquí.
En cualquier caso la cuestión de la relación con lo público ha de mantenerse siempre "en observación", en un paréntesis prolongado…en una especie de constante revisión, porque sí es cierto que hay peligro de anquilosamiento, de posible acomodo. Es necesaria la autocrítica.
Es por ello que las relaciones con las instituciones y con otros agentes culturales deben entenderse como un elemento más de trabajo, como aprendizaje de cultura política y como un aspecto indisociable de la producción artística actual.

BÚSQUEDA:
ÍNDICE_DE_TEXTOS:
El contenido de este sitio es "copyleft" bajo licencia Creative Commons.
Para las imágenes y vídeos: Attribution-NonCommercial-ShareAlike 1.0.
Para los textos: Attribution-NoDerivs-NonCommercial 1.0.
Powered by: Movable Type.